Sé Bueno, Sé Agradecido, Sé Paciente
Si algo he aprendido a lo largo de mis 26 (casi 27) años de edad, es que la clave para una vida armoniosa y feliz está en ser una persona buena, agradecida y paciente.
Sé bueno.
Yo tuve la gracia y la bendición de nacer en una casa donde la bondad, la gentileza y la nobleza eran unos de los pilares de la educación que se nos dio. Ayudar a todos, sin importar quienes sean, qué hayan hecho o de dónde son. Ayudar sin limitaciones, sin excusas y sin esperar nada a cambio.
Ser bueno con los demás puede resultar una tarea fácil, pero otras veces pareciera casi imposible, ya sea que nos hayan herido, que nos hayan mentido o nos hayan traicionado. En esas ocaciones hay que dar el 101% de lo que tenemos, pues si nos cuesta es porque vale la pena. Tenemos que aprender a dejar a un lado nuestro orgullo, nuestros sentimientos y nuestros prejuicios para así poder ayudar a todos los que nos rodean.
Sé bueno con todas las personas que crucen por tu camino, pues no sabes quién necesita de una sonrisa para seguir adelante con su vida, quién necesita una mano para no caer en el abismo de su interior y quién necesita de un amigo para enseñarle el camino de la felicidad.
Sé agradecido.
Todo lo que hoy tienes, tu persona, tus bienes, tu salud y de más, todo eso ha sido dado a ti directa o indirectamente por otra persona. Ser agradecido es uno de los valores más importantes para mi vida y siento que debería de ser un valor que se debe impartir en todos los hogares. No solamente dar gracias por tener que dar gracias, sino hacerle entender a los demás que todo lo que se les da es un regalo y una bendición, aunque muchas veces no lo merezcamos o no lo hayamos pedido, todo se nos da.
Ser agradecido no solamente demuestra que sabes reconocer que se te ha dado algo, sino también que tienes la humildad y la sencillez de hacerle saber a la otra persona la gratitud que sientes hacia él o ella. Dar gracias nunca te hará inferior a nadie, solamente te ayuda a ti y a la otra persona a reconocer el favor que nos han hecho.
Sé paciente.
Yo sé que cuesta mucho esperar a que se nos den las cosas, a que se nos respondan nuestras respuestas o a que se nos muestre nuestro camino, pero la vida tiene su tiempo para todo. Tal vez y ahora no es el momento para obtener lo que queremos, lo que sí te puedo decir es que eso que realmente quieres llegará a tu vida tarde o temprano.
En lo personal, he sido paciente y la vida me ha ido dando lo que necesito, como si mi camino fuera un rompecabezas y cada una de sus piezas va cayendo exactamente donde debe ir. Si realmente quieres algo, la vida y el universo van a conspirar a tu favor. Sólo tienes que ser un poco paciente, pues los tiempos de la vida y los nuestros no siempre van en sincronía.
Sé bueno, sé agradecido, sé paciente y verás el gran cambio que tendrá tu vida.
Sé bueno.
Yo tuve la gracia y la bendición de nacer en una casa donde la bondad, la gentileza y la nobleza eran unos de los pilares de la educación que se nos dio. Ayudar a todos, sin importar quienes sean, qué hayan hecho o de dónde son. Ayudar sin limitaciones, sin excusas y sin esperar nada a cambio.
Ser bueno con los demás puede resultar una tarea fácil, pero otras veces pareciera casi imposible, ya sea que nos hayan herido, que nos hayan mentido o nos hayan traicionado. En esas ocaciones hay que dar el 101% de lo que tenemos, pues si nos cuesta es porque vale la pena. Tenemos que aprender a dejar a un lado nuestro orgullo, nuestros sentimientos y nuestros prejuicios para así poder ayudar a todos los que nos rodean.
Sé bueno con todas las personas que crucen por tu camino, pues no sabes quién necesita de una sonrisa para seguir adelante con su vida, quién necesita una mano para no caer en el abismo de su interior y quién necesita de un amigo para enseñarle el camino de la felicidad.
Sé agradecido.
Todo lo que hoy tienes, tu persona, tus bienes, tu salud y de más, todo eso ha sido dado a ti directa o indirectamente por otra persona. Ser agradecido es uno de los valores más importantes para mi vida y siento que debería de ser un valor que se debe impartir en todos los hogares. No solamente dar gracias por tener que dar gracias, sino hacerle entender a los demás que todo lo que se les da es un regalo y una bendición, aunque muchas veces no lo merezcamos o no lo hayamos pedido, todo se nos da.
Ser agradecido no solamente demuestra que sabes reconocer que se te ha dado algo, sino también que tienes la humildad y la sencillez de hacerle saber a la otra persona la gratitud que sientes hacia él o ella. Dar gracias nunca te hará inferior a nadie, solamente te ayuda a ti y a la otra persona a reconocer el favor que nos han hecho.
Sé paciente.
Yo sé que cuesta mucho esperar a que se nos den las cosas, a que se nos respondan nuestras respuestas o a que se nos muestre nuestro camino, pero la vida tiene su tiempo para todo. Tal vez y ahora no es el momento para obtener lo que queremos, lo que sí te puedo decir es que eso que realmente quieres llegará a tu vida tarde o temprano.
En lo personal, he sido paciente y la vida me ha ido dando lo que necesito, como si mi camino fuera un rompecabezas y cada una de sus piezas va cayendo exactamente donde debe ir. Si realmente quieres algo, la vida y el universo van a conspirar a tu favor. Sólo tienes que ser un poco paciente, pues los tiempos de la vida y los nuestros no siempre van en sincronía.
Sé bueno, sé agradecido, sé paciente y verás el gran cambio que tendrá tu vida.
MORGAN DAVID DE LOSSY VIA GETTY IMAGES
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